Hace un par de semanas estaba en clase limpiando chipirones (si, chicos, he vuelto a cuarto frío) y Sergio Fernández, profesor de segundo curso, hizo unas magdalenas muy peculiares para sus alumnos de carta...
Como es obvio, le pedí la receta despues de probarlas y ayer me decidí a hacerlas en casa, pues me gustaron mucho. Aunque no os convenza mucho la idea, os recomiendo que la probéis, pues no saben nada a verdura, sino que lo que hacen es que guarden mejor la humedad y no se resequen tan pronto como las normales.
Ingredientes:
- 200 g azúcar
- 180 g mantequilla
- 5 huevos
- 200 g harina
- 8 g levadura química
- 2 gotas esencia de limón
- Ralladura de zanahoria
- Ralladura de calabacín
- Pepitas de chocolate
Empezamos batiendo en un bol la mantequilla con el azúcar, hasta que estén bien batida, formando una pasta cremosa. Ponemos la esencia de limón, mezclamos y vamos añadiendo los huevos uno a uno, incorporando bien el primero antes de añadir el siguiente. La mezcla en este paso puede tener un aspecto cortado, pero no pasa nada, se arregla cuando añadamos la levadura tamizada, que será despues de los huevos. Cuando todo esté bien mezclado y batido, agregamos la levadura y la harina tamizada y removemos con una espátula o cuchara, para que la masa no baje.
Lavamos y pelamos la zanahoria y la rallamos con un rallador grueso. Con el calabacín hacemos lo mismo pero lo dejamos con piel, para que dé color. Metemos la ralladura en la masa con las pepitas de chocolate y mezclamos hasta que esté todo bien repartido. Conviene no saturar la mezcla de chocolate y verdura, porque si no, le costará más subir.
En cápsulas de papel del tamaño que queráis (depende de si queréis mini magdalenas o mojicones), incluso un molde de bizcocho si preferís cortarlo vosotros, ponemos la masa, rellenando el molde hasta la mitad o, como mucho, las 3/4 partes, ya que en el horno subirá y queremos que quede monísimo de la muerte.
Horneamos. Para ello, metemos en el horno precalentado a 220ºC durante unos 10 minutos si son mini magdalenas, a 200ºC durante 15 minutos si son mojicones, y a 180ºC durante 25-30 minutos si es un bizcocho.
Es importante cocerlas sobre una rejilla, ya que coge menos calor que la bandeja y evitamos que se queden negruzcas por debajo.
Dejamos enfriar un poco y ¡a comer!
¿Os atrevéis con nuevas tendencias?
Hummmmmmmmmmmmmm que buena pinta, haber cuando inventan un email que puedas mandar algunas...
ResponderEliminarMuy original, te felicito, tienen muy buena pinta
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