lunes, 30 de mayo de 2011

Cupcakes de chocolate

¡Buenos días! El sábado, enredando en la cocina me decidí por hacer unas cupcakes, pues invité a dos amigos a cenar y no tenia idea de que hacer de postre. Hace tiempo, un amigo me dio un recorte de periódico en el que hablaban de las cupcakes, pastelitos adornados que, antes de que existieran los moldes de magdalenas, se hacían en tazas, de ahí su nombre. La base es una magdalena, la cual se rellena o decora con un glaseado. En el artículo vienen 4 recetas diferentes de distintos locales de Madrid y Barcelona. Yo soy una persona muy golosa asi que elegí la cupcake de chocolate con un frosting de chocolate también. La verdad es que para ser la primera vez que me metía con algo de este tipo, no me quedaron nada mal, aunque tengo que coger mas soltura con la manga pastelera, jaja.
Ingredientes para la masa:
  • 220 g de azúcar
  • 210 g de harina
  • 125 g de leche
  • 100 g de mantequilla
  • 2 huevos
  • 2 cucharadas de cacao puro en polvo
  • 1 cucharadita de levadura
Ingredientes para el frosting:
  • 150 g de mantequilla
  • 180 g de azúcar glass
  • Cacao
  • Fideos de colores y fideos de chocolate para decorar

Precalentar el horno a 180ºC. Con los ingredientes de la masa, disolver el cacao en la leche y reservar. Tamizar la harina con la levadura. En un bol, batir la mantequilla con el azúcar hasta que esté cremosa, incorporar uno a uno los huevos y mezclar bien. Añadir a ese bol un tercio de la mezcla de la harina y la levadura y, sin dejar de batir, añadir la mitad de la leche, otro tercio de la harina, la otra mitad de la leche y el último tercio de la harina sin dejar de batir en ningún momento. El resultado es una mezcla lisa y cremosa. Verter la mezcla en cápsulas de silicona y hornear durante 20-25 minutos.
Para el "frosting", batimos bien la mantequilla hasta que esté cremosa, añadir el azúcar glass sin dejar de batir. Por último, incorporar el cacao y batir bien hasta llegar al punto de chocolate que queramos.
Cuando las magdalenas base estén frías, meter el frosting en una manga pastelera y adornarlas con paciencia. Espolvorear con los fideos de colores y chocolate y... ¡listo para comer!


viernes, 27 de mayo de 2011

Hortobagyi pancakes

Aquí estoy otro dia más, esta vez con una receta algo internacional. Los pancakes a la Hortobagyi son un plato húngaro que probé cuando estuve en Budapest, una ciudad preciosa, por cierto. Su gastronomía me gustó mucho, con sabores picantes conseguidos con la paprika, muy utilizada. Antes de volver, me compré un libro de recetas de Hungría y un sobre de paprika, pues era algo que quería probar a hacer en casa, y el resultado no fue malo del todo aunque si distinto ya que hice algún que otro cambio, como es obvio.

Para el relleno:
  • Una cucharada de manteca de cerdo (el aceite de oliva, ese gran desconocido en la cocina de tantos países...)
  • 1 cebolla
  • 2 cucharaditas de paprika (o pimentón picante)
  • 400 g de carne de ternera picada
  • 5 cucharadas de tomate triturado
  • Agua
  • Sal
  • 200 ml de nata
Para las crêpes:
  • 200 g de harina
  • Una pizca de sal
  • 2 huevos
  • 250 ml de leche
  • 100 ml de agua
Comenzamos haciendo las crêpes. Para ello, ponemos todos los ingredientes en el vaso de la batidora y batimos bien hasta obtener una crema. Untamos una sartén con un poco de mantequilla (muy poco) y la ponemos a fuego medio. Cuando la sertén esté caliente, añadimos un cucharon de la masa y la repartimos por toda la superficie con movimientos circulares. Cuando esté casi cuajada, damos la vuelta a la crêpe y hacemos por el otro lado con cuidado de que no se queme. Repetimos hasta que no quede masa. Se recomienda hacer las crêpes muy finas, pues despues será mucho mas fácil doblarlas con el relleno.
Para el relleno, ponemos la manteca de cerdo en una cazuela, añadimos la cebolla muy picada y dejamos que se dore a fuego medio-bajo, consiguiendo así que se haga mucho sin quemarse. Cuando veamos que está en su punto, añadimos la paprika, removiendo bien para que no se queme y, enseguida, ponemos la carne, mezclando todo bien. La carne tiene que hacerse al calor, sin llegar a hervir, por lo que pondremos un poco de agua de vez en cuando para que no se quede sin salsa, pero no mucha como para ahogarla. Agregamos el tomate triturado, removemos bien, salamos y dejamos que termine de hacerse. Cuando la carne esté en su punto, la colamos, dejando la carne casi sin salsa. El líquido colado lo ponemos de nuevo en la cazuela y le añadimos la nata, ponemos a fuego medio durante un par de minutos, ligando todo bien.
Una vez hecho todo esto, montamos los pancakes. Untamos una crêpe con un poco de la crema de la cazuela, ponemos un poco de relleno, dobamos de forma que no se salga y vamos colocando en una fuente. Repetimos el proceso hasta que nos quedemos sin crêpes o sin relleno. Cubrimos los pastelitos con la salsa sobrante y decoramos con un poco de nata.
Como veis, la presentación que yo hice tampoco es gran cosa, pero es la primera vez que los hacía y, sinceramente, me gustaron mucho.
Sobra decir que en todos los sitios donde se emplee mantequilla puede ser sustituída por aceite de oliva, el cual es mas sano y menos calórico.
Sin más que escribir y esperando que os guste, os dejo alguna foto de Budapest, la perla del Danubio.



miércoles, 25 de mayo de 2011

Risotto de setas

Buscando en la cocina que podía hacer para comer me he encontrado una bolsita de setas deshidratadas que me dió mi madre y se me ha ocurrido un risotto de setas, muy cremoso y que no lleva mucho tiempo. Para hacerlo, se necesita paciencia, pues el truco de los arroces cremosos es no dejar de remover. Las setas utilizadas pueden ser cualquiera, tanto deshidratadas como frescas. En caso de utilizar las primeras, ponerlas a remojo durante 20 minutos antes de cocinarlas. También queda muy bien con champiñones o setas de cardo frescas, y los encontramos en cualquier supermercado.

Ingredientes:
  • 150 g setas
  • 200 g arroz
  • 1/2 litro de caldo de pollo (si no tenemos, deshacer una pastilla de caldo en 1 litro de agua hirviendo)
  • Una copita de vino blanco
  • Una cebolla
  • 4 cucharadas de queso mascarpone
  • 1 puñado de queso rallado
  • Aceite
Para empezar, picamos la cebolla muy finita, para que apenas se note a la hora de comer, y la pochamos en una cazuela con aceite a fuego medio-bajo. Mientras se dora removiendo de vez en cuando, vamos picando las setas en trozos grandes, para que se noten, pero no enormes. Cuando la cebolla esté dorada, casi transparente, ponemos las setas y dejamos que se pochen un poquito. Añadimos el vino y dejamos reducir unos 2 minutos para eliminar todo el alcohol, sin dejar de remover para que no se pegue. Agregamos el arroz, removemos para que se empape bien y comenzamos a añadir caldo, de poco en poco, dejando que se absorba cada vez, sin dejar de remover, hasta que el arroz esté blandito. Hay que echar el caldo poco a poco para que no se cueza el arroz, sino que se infle por el caldo. Si el caldo es comprado o en pastillas no sera necesario rectificar el punto de sal. Si es casero, añadir sal al gusto. Si se nos termina el caldo y el arroz aún no esta bien hecho, seguimos cubriendo con agua. Cuando veamos que el arroz está en su punto, parar de añadir caldo y seguir removiendo hasta que esté cremoso, que al hacer un surco con la cuchara, no se separe del todo pero que quede la marca del mismo.


En una fuente en la que vayamos a presentarlo ponemos el queso rallado y el mascarpone, vertemos el arroz con setas y removemos bien, para que los quesos se fundan con el calor del arroz. Servir inmediatamente. En mi caso, como era comida para mi sola, lo mezclé en un plato, y el arroz sobrante lo metí en un tupper en la nevera, sin los quesos, para mezclarlo cuando vaya a comerlo de nuevo.
¡Buen provecho!

martes, 24 de mayo de 2011

Quesada pasiega

Tarde de tormenta en Salamanca, con lo bonito que había empezado el día, totalmente soleado. Aunque todas las cosa tienen su lado bueno. ¿El de la tormenta? Pues pasar la tarde entre pucheros, cosa que me encanta. Y como me encanta el dulce, hoy me he decantado por una quesada que, aunque es de las cosas más fáciles de hacer, es riquísima, tanto para desayuno como para merienda, postre...


Para hacerla, cinco cositas de nada:
  • 2 tazas de leche
  • 1 taza de azúcar
  • 1 taza de harina
  • 2 huevos
  • 1 yogur de limón
  • 1 cucharadita de levadura
  • Ralladura de limón
Mezclamos y batimos el yogur, la leche y los huevos. Rallamos la corteza del limón y la añadimos, agregamos la levadura, el azúcar y la harina y batimos todos hasta hacer una crema.
Untamos un molde (yo he utilizado uno redondo de unos 25 cm) con un poco de mantequilla para evitar que se pegue al desmoldarla. Vertemos la crema preparada en el molde y espolvoreamos la superficie con canela. Introducimos en el horno precalentado a 180ºC y la dejamos "respirar" durante unos 40-45 minutos. Para saber cuando está hecha, pinchamos con un cuchillo hasta que salga limpio. Por último, dejamos enfriar y ¡listo!
Acompañada de mermelada de frambuesa está deliciosa...
¡Que la disfrutéis!

lunes, 23 de mayo de 2011

Tarta de tres chocolates

Hoy vengo con algo dulce dulce, para los más golosos y, a la vez, muy fácil. Esta tarta la hice en el 12º cumpleaños de mi hermana Marta, porque es muy chocolatera y le encanta. Cada vez que voy a casa intenta que la haga o, al menos, me la pide, jeje.
Esta receta me la recomendo Sil, y la primera vez que la hicimos fue como experimento en una fiesta con todos los amigos, y ni que decir tiene que no sobró nada de nada. Aquí la dejo para que vayais probando:

Ingredientes:
  • Un paquete de galletas (yo uso las María sin dorar, que se trituran muy bien)
  • Mantequilla o margarina
  • 500 ml de nata líquida (la podemos sustituir por leche pero tardará algo mas en cuajar)
  • 500 ml de leche
  • 4 sobres de cuajada en polvo
  • 150 g de chocolate negro
  • 100 g de chocolate con leche
  • 100 g de chocolate blanco
  • 150 g de azúcar
Para hacer la base, mezclamos las galletas trituradas con la mantequilla hasta formar una pasta homogénea y la colocamos en un molde de 20-22 cm. La metemos al frigorífico hasta empezar con la capa 1.
Para la capa 1 (chocolate negro) ponemos en una cazuela 200 ml de nata, 200 ml de leche, 50 g de azúcar, 1 sobre y 1/3 de cuajada y 150 g de chocolate negro, la ponemos a fuego medio mientras removemos continuamente. Esperamos a que hierva la mezcla sin dejar de remover y cuando haya hervido un par de minutos se retira del fuego y se vierte cuidadosamente sobre la base. Dejamos enfriar en el frigorífico mientras preparamos la capa 2
Para la capa 2 (chocolate blanco) ponemos en una cazuela 100 ml de nata, 200 ml de leche, 50 g de azúcar, 1 sobre y 1/3 de cuajada y 100 g de chocolate blanco y procedemos como antes, vertiéndolo sobre la capa 1
Para la capa 3 (chocolate con leche) ponemos en la cazuela 200 ml de nata, 100 ml de leche, 50 g de azúcar, 1 sobre y 1/3 de cuajada y 100 g de chocolate con leche, volvemos a proceder como en la capa de chocolate negro y la vertemos sobre la capa 2, quedando asi la base, la capa de chocolate negro, la capa de chocolate blanco y la capa de chocolate con leche.
Dejamos reposar en el frigorífico durante al menos 8 horas, y queda mejor si se sirve de un día para otro. Por último, después de desmoldar, decoramos con galleta molida. Ya está lista para comer.
¡Espero que os guste!

sábado, 21 de mayo de 2011

Croquetas de gambas

Aquí vuelvo con cositas nuevas para compartir… Hoy con una recetita bien simple pero muy sabrosa, que he hecho hoy y me ha parecido fantástica para ir subiendo y rellenado el blog. Hoy tocan croquetas de gambas, aunque he de decir que yo las he hecho con langostinos congelados, que, al fin y al cabo, tengo una economía de estudiante y tampoco me voy a poner a comprar gambas frescas, aunque no tengan nada que ver, ¿verdad?


Ingredientes:
  • 200 g gambas o langostinos crudos sin pelar
  • 500 ml leche
  • Aceite
  • 4 cucharadas colmadas de harina
Lo primero de todo es limpiar las gambas poniendo las cabezas y las peladuras en un cazo. Añadimos en el cazo el medio litro de leche y ponemos a fuego medio, dejando que hierva y machacando las cabezas con una cuchara de palo para sacarles bien el jugo. Colamos y reservamos. Con las gambas peladas, las cortamos en trocitos pequeños, de forma que podamos hacer croquetas pequeñas sin que las gambas nos estropeen la forma. En una cazuela de buen tamaño ponemos un buen chorro de aceite, calentamos a fugo medio y cuando esté caliente, añadimos la harina, removiendo bien para que se cocine y no quede cruda. Cuando la tengamos bien cocinada añadiremos la leche de gambas que teníamos reservada poco a poco removiendo bien para que no queden grumos hasta que la masa se despegue de las paredes de la cazuela sin problemas y veamos que tenemos una masa con la que podamos trabajar bien las bolas para rebozar. En ese momento, añadimos las gambas troceadas y dejamos con el fuego apagado unos minutos, para que se hagan con el calor residual, sin dejar de remover. Reservamos la masa en plato o bandeja para que se enfríe, hacemos bolitas pequeñas (de bocado) y las pasamos por huevo y pan rallado. En una sartén calentamos abundante aceite y las freímos hasta que estén doraditas. Otra opción mucho más limpia y rápida, es hacerlas en una freidora. Las sacamos a una fuente con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y las presentamos tibias, listas para comer.

viernes, 20 de mayo de 2011

Regalos de cumple

Hola a tod@s otro día más... Poco a poco voy rellenando espacios en este rinconcito para que vayáis aprendiendo trucos (para quien los necesite) y para admitir críticas, que para eso estamos :)
Hoy vengo con un regalo de cumple. Y es que hace poco, algo mas de un mes, que cumplí 23 añitos. La historia es que a mí me encanta cocinar como os dije al principio, pero vivo de alquiler con dos compañeras de la facultad y, como en todo piso alquilado a estudiantes, el menaje de cocina brilla por su ausencia... Así que mis padres, sabiendo de mis carencias y aficiones, me hicieron este maravilloso regalo que uso con bastante frecuencia, y que me han salvado en mas de una comida/cena con mis amigos.
Bueno, es que esa parte de mi vida no os la he contado, pero hoy tengo tiempo... Mis amigas, estudiantes como yo, no cocinan practicamente ninguna, ya sea por pereza, odio a la vitroceramica o falta de ganas, por lo que estan deseando que llegue la cena semanal en mi casa para ponerse las botas, puesto que me encanta sorprenderles con cosas nuevas y ellos estan siempre encantados de ser mis conejillos de indias. Y ahora, con mis moldes de silicona, aun más. Muchas gracias por este estupendo regalo, así que hoy, un besito para mis papis. Hasta dentro de poco.

martes, 17 de mayo de 2011

Quiche fría

¡Hola de nuevo! Aquí estoy otra vez pero hoy para traeros alguna recetina fácil para todos los públicos. Y es que el otro día me dieron una gran noticia. Una amiga de mi madre celebraba su cumple por todo lo alto, con un montón de amigos. Pero tiene un problema y es que ella y la cocina son enemigas íntimas, así que me ofrecí para hacerle el menú como ella quisiera, puesto que el dia de mañana me gustaría dedicarme a ello y… ¿qué mejor forma de ir empezando?
Después de hablar con ella y demás, me dijo que la fiesta iba a ser de pie, con mesas tipo buffet y para que todo fuera perfecto quería que la comida fuera cuanto mas cómoda de comer, mejor, y a ser posible, fría. Así que me puse manos a la obra, improvisando un poco porque Maribel no tenía ni idea de lo que podía hacer para sorprender a sus invitados. Aquí tenéis la lista de bandejas que hice, aunque poco a poco ire subiendo las recetas acompañadas de sus correspondientes fotos :D
  • Brandada de bacalao
  • Canapés variados
  • Croquetas de gambas
  • Empanada de bacon, queso y dátiles
  • Empanada de carne y pimientos
  • Hojaldre de salmón y espinacas
  • Quiche Lorraine
  • Saladitos de chistorra
Hoy os voy a enseñar la quiche lorraine, la cosa mas fácil del mundo y con lo que el éxito esta asegurado. Hice dos para el cumple y no sobró absolutamente nada.
Ingredientes:
  • Masa quebrada o masa brisa (la venden en prácticamente todos los supermercados, aunque recomiendo la de Lidl, buenísima y muy bien de precio)
  • 200 ml nata líquida
  • 2 huevos
  • 2 puerros
  • 100 g bacon en taquitos
  • 100 g de salmon fresco
  • Sal
  • Pimienta
Lo primero de todo es limpiar bien todos los ingredientes, es decir, quitar a los puerros el penacho verde, las raíces y la primera capa de “piel” y meterlos bajo el grifo. Para el salmón, quitar piel y espinas. Lo mas cómodo para esta labor es usar una pinza de depilar bien limpia y con el dedo, ir notando las espinas para sacarlas una a una. Es un trabajo muy laborioso, pero merece la pena.
El siguiente paso es picar el puerro lo mas finito posible, y lo ponemos a pochar en una sartén con un chorrito de oliva. Cuando esté casi a punto añadimos el bacon, mezclando todo bien hasta que se haga. Apagamos el fuego. En un bol ponemos los huevos, la nata y salpimentamos y añadimos el puerro pochado con el bacon.
En un molde redondo de unos 28 cm untado de mantequilla estiramos la masa, ajustándola a las paredes del mismo, de forma que quede como un molde de masa dentro del molde. Añadimos el relleno del bol y repartimos los daditos de salmón por toda la quiche.
Precalentamos el horno a 180ºC durante unos 10 minutos, introducimos la quiche y dejamos hacer hasta que la superficie esté dorada (vienen a ser unos 20 o 25 minutos).
Dejamos que se enfrie y desmoldamos poniendo un plato encima y dándole la vuelta, quitamos el molde y ponemos otro plato girándola de nuevo. Es muy importante que la quiche esté fría al desmoldarla pues, de lo contrario, se deshará.
En caso de que no encontréis la masa brisa, hacerla es relativamente fácil. Os dejo la receta por si acaso:
  • 200 g harina
  • 100 g mantequilla
  • 1 huevo
  • 2 cucharadas de agua
  • Una pizca de sal
En un bol, mezclamos todos los ingredientes hasta tener una pasta homogénea y que sea manejable para el rodillo. Añadir mas agua si fuera necesario. Estiramos con el rodillo formando un disco, untamos un molde con mantequilla y lo forramos con esta masa. Procedemos como anteriormente.
Espero que os haya gustado y que muchos la probéis en casa, no os defraudará.
¡Qué aproveche y ya me iréis contando la experiencia!

lunes, 16 de mayo de 2011

Mis comienzos

¡Hola a todos!
Como veis, soy absolutamente nueva en esto de los blogs, pero llevo muchísimo tiempo pensando en hacer uno, y aquí está. ¿La razón? Campartir los secretos de cocina con todo aquél que quiera y le guste. Como presentación, soy María, de 23 años, y desde siempre he estado metida entre pucheros, ya sea por mi abuela, por mi madre o por mi misma, aunque mi interés por los sabores, los cambios y los experimentos empezaron hace unos 5 años, cuando me fui a estudiar fuera de casa, sin la comida de mamá y sin los tuppers de cocido...
Y ahora, la cocina me da una de las mayores satisfacciones de mi vida, pues no hay mejor forma de agradacer algo a alguien que cocinando.
Sin más que decir, doy la bienvenida a todos los visitantes :D
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