¡Buenas y calurosas tardes para todos! Puesto que tenemos una ola de calor considerable azotando nuestras cabezas, hoy traigo dos postres presentados también en chupitos, como hice en su día con los de fresa y limón, pero esta vez de mousse de chocolate y crema pastelera. Una vez bien fresquitos, son una delicia para verano.
Para la crema pastelera. Ingredientes:
- 4 yemas de huevo
- 500 ml de leche
- 5 cucharadas de azúcar
- 2 cucharadas de harina de maíz (maicena)
En una cazuela ponemos la leche, reservando un vaso, con el azúcar, a fuego medio-bajo, dejando que hierva. Removemos de vez en cuando para que no se pegue. Mientras se calienta la leche, diluimos la maicena en el vaso de leche fría reservado y añadimos las yemas batidas. Removemos bien y, cuando la leche azucarada hierva, añadimos la mezcla a la cazuela removiendo siempre hacia el mismo lado para que no se corte, dejando que espese. Vertemos a un bol y dejamos enfriar tapandolo con film en contacto con la crema para que no se forme la película exterior. Guardamos en el frigorífico hasta el momento de servir, que la metemos en una manga pastelera para presentarla en chupitos, así ocupará menos espacio en el frigorífico.
Mousse de chocolate. Ingredientes:
- 3 huevos
- 150 g chocolate para fundir
- 200 ml nata
- 3 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada de mantequilla
- Sal
Fundimos el chocolate con la mantequilla y removemos bien hasta que quede una mezcla homogénea. Dejamos entibiar. Mientras, en dos boles, separamos las yemas de las claras. Añadimos el azúcar a las yemas y batimos bien, hasta que queden blanquecinas. Añadimos el chocolate a las yemas cuando esté tibio, para que no cuajen, y mezclamos bien. En el vaso de la batidora, montamos bien la nata y la añadimos al chocolate con yemas, batiendo suavemente. Con unas varillas totalmente limpias y secas, montamos las claras a punto de nieve con una pizca de sal. Añadimos la mezcla de chocolate a las claras, poco a poco, mientras mezclamos con moviemientos envolventes, cuidando que no se bajen. Vertemos en los vasos de chupito o en los cuencos de presentación que vayamos a utilizar y dejamos cuajar en el frigorífico al menos 6 horas. Con esta mousse no es recomendable hacer la presentación una vez que esté cuajada, pues perdería por completo la textura espumosa que adquiere al enfriarse.
Nota: Para que las claras se monten mejor, es recomendable dejarlas una media hora a temperatura ambiente, pues tibias suben antes. En cambio, para la nata, es preferible meterla en el congelador aprox. media hora antes de la preparación, para que monte más rápido.
¡Espero que os guste!
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